Buscar este blog

lunes, 24 de julio de 2006

Prometo Darte Arte

redundancia. (Del lat. redundantĭa). f. Sobra o demasiada abundancia de cualquier cosa o en cualquier línea. 2. Repetición o uso excesivo de una palabra o concepto. 3. Cierta repetición de la información contenida en un mensaje, que permite, a pesar de la pérdida de una parte de este, reconstruir su contenido.
(Biblioteca de Consulta Microsoft® Encarta® 2005. © 1993-2004 Microsoft Corporation.)
Eh.. Gracías. Tiene razón, aunque la verdad el problema no es la palabra en sí, o si la que use la use a propósito, el problema en sí soy yo mismo que no encuentro las palabras adecuadas, confundo predicados con sujetos y tampoco busques la poesía entre líneas porque aquí no hay poesía, hay encanto y químico diría yo, locas y bellas como ella, y si me escuchas prometo darte Arte.

Ella entonces se quedo esperándome en el Bar, uno de los pocos que existía en el Parque donde ahora echan cuentos, hacen requisas y pasan niñas lindas. Seguro que en mi inconsciente sabía que ese momento era único, irrepetible y aún allí no me daba cuenta, fue la cita nunca esperada, por eso las palabras que debieron planearse no aparecieron, seguro ella estaba tan linda como hoy, y sin problema, con su acento costeño, quizo esperar, quiso escuchar esa música que seguro no escuchaba de vez en cuando, después y ahora el reloj marca nuestras vidas, que cambian y pasan y no hay forma de que giren para el otro lado, me alegra verte y me alegra verte tan linda como nunca te pude ver, como esos minutos que te deje esperando para traer el billete que se me habia quedado, bestía si soy, entonces lo cotidiano ya no es ni siquiera pasajero, y ya no somos los graduandos de aquella vez, solo para ti quisiera poder devolver ese reloj y compartir esos momentos contigo, mamasota como te escribia en esos mail que ahora me hacen falta y me harán por siempre, ojala el reloj siga marcando tus horas y sea el vínculo inagotable de que las cosas deben esperar, como esa vez, que nunca salen como uno las planea, y que entonces se dá uno cuenta ahora que fueron irrepetibles, extraño ir a tu casa y verte de entrecasa, como te me creciste y como crecimos de un momento a otro, que cuando nos dimos cuenta ya teníamos otros rumbos, la verdad dirán que como que yo andaba ocupado en otras cosas, parece, y luego la ocupación fue mutua, quisiera volver a encontrarte y abrazarte, mamasota.
Alguno de estos días, como esa vez, deberías venir a visitarme.

No hay comentarios. :

Publicar un comentario