Volví a leer el libro este, el cuento este que partió mi humanidad adolescente en 999 pedazos, digo para no hacerle caso a Cristina, en esos días en que andaba solo, sin rumbo, tal vez más flaco y seguramente más ernesto que ahora. Lo ando leyendo por esas cosas de la vida, esas vocecitas interiores que escuchas cuando menos lo piensas, y que me dice que ella me hace falta, igual no lo sabe, pero es así, bueno el caso es que confirmo mi decisión de cuando haga el viaje prometido voy a llevarle una copia y es que si mal no recuerdo algún día se la prometí porque parecía aún no lo había leído. Leo solo a ratos para poder asimilar esos cambios que ahora comprendo son fruto de los años que ya se fueron y no volverán, no lo digo yo lo dice la canción. Mientras tanto, volvieron los payasos a deambular por las calles de la metrolinica ciudad esta con nombre algo extraño para ellos los que viven outside abroad quizas no importa, estan por ahí con sus camiseticas negras y sus lenguas pintadas, como si todo fuera cuestión de lenguas, lengua la de ella con su puntica rosadita y ese sabor amargo que me dejaba cuando se iba, si tal vez ud piense que son ellos, pero no ellos bienvenidos, si merecen tal bendición porque nos traen su cultura y historias que cuentan, el punto negativo son los otros, los que creen que siendo payasos, payasitos o llamemolos cuenteros nos cautivan a los que no lo necesitamos, y es que en mi opinión bucaramanga no necesita semejante festival, porque es un vacio en el universo que siempre nos ofrecen, sorry por los que me entienden porque tengo que usar palabras no ritmicas y comunes para explicar claramente lo que sucede, me interrumpe el cotidiano grito de buenas! Correo!, sigo después de las gradas que no faltan y los pasos ya contados, siempre necesito más, y es que el caso es que el resto de días nos pintan a los cuenteritos como los payasitos que cuentan chistes, y bueno menos mal vienen estos que si saben a tratar de enseñarlos pero en tantos años y no han aprendido tal vez la culpa la tenga el que algún día se lo creyo y disque hasta se lo invento, y digo, sorry tambien por los que les gusta esta semanita de los mil demonios ni hablar de la que pronto viene con nombre de feria, como si la feria fuera ella y fuera bonita, es decir, y si fuera ella?. Me monté, que feo suena, se monta uno a los caballos o la montaña rusa, que aquí a proposito rollercoaster no hay, take a bus para ser mas exactos y hay dios no vale la pena ni hablar de ello es más no recuerdo porque lo incluyo en mi historia, que ha dejado de ser diaria, espectacular más y menos profunda que las de siempre, y el glifosato que mata matas, animales y yo diria sueños por un país mejor, palacito presidencial si lo quieren, y la guaca que enguaca, y ni si que es peculado, pero que paguen, y como diria la canción, cuidado con tu hermana porque una noche de estas le quito las bragas!.
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