Me quedo en blanco, no como complemento del negro que me gusta, ni como continuación mental del color en tí sobre ti y debajo de ti que me podría volver loco, me quedo en blanco en dirección al norte, a las cosas que nunca se solucionaran, al espacio vacio buscando palabras, necesitando razones, de paso te dejo en blanco a ti, solo por la convicción de que nunca estes sola, de que el gris de esta lluvia no nos invada, el blanco de la niebba, el blanco hielo que iré a conocer, y el blanco mortal de tus silencios que poco a poco me fueron matando la ilusión...
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