¿Ah?

Ahora me vas a salir con que creiste no escuchar todas esas canciones que te recordaban algo, que las notas pasaron por encima de ti y no te tocaron? Que puedes ser tan fuerte que nada te derrumba? Que te puedes esconder en cualquier excusa que encuentras?

Me fuí de espaldas a los fuegos pirotécnicos que alumbraban la ciudad de fiesta de las noches perdidas y los sueños destruídos, de las músicas con las que crecimos, evite mirar de para atrás, de ver la luna que te regale convertidas en arcoiris que ya no existen. Me das tanta rabia.
Eres tan predecible que le quitas gracia a las cosas que no han de venir. Odio tus malditas fotos cada vez que las pones.

Odio el esmalte rojo en tus uñas y cualquier cosa que se le parezca.

Odio los zapatos puntiagudos para creerse importante y muy mujer.

A esa hora el transmi huele a aguardiente, el señor de al lado fuma marihuana y ella se recuesta en la baranda, saca de su mochila arhuaca - si arhuaca - la manzana que daño a toda la humanidad, se arregla su balaca, deja embriagarme un poco con su pelo mono corto y sus ojos profundos y perdidos en lugares no imaginados, da un mordisco a su manzana, y se acaba este sueño. Te moriste guay, será tu carcel y nunca saldrás. Ah!