¿y si hablamos de cumbia?… las calles olvidadas, el otoño que llegará, el viento, no el viento no.. el aire… bueno, el viento a la madrugada caminando por ahí, el subte de la b a la A, una que otra estrella, hacer planes, planes por hacer mejor, escribir y leer, necesito leerte, el olvido que serás, los monos que caminan y no saben hablar, los monos que no son monos, la rubia que twittea, el departamento que encuentro, la luz, la canilla, las tres rayas, el grafito, el cambio, el mejor postor, la gafa negra, el cable a la pared, la terraza en reparación, la vida, la nevera cerrada, el living y el living contigo, la asesoría y el tatuaje, la chancla, mi Mariana, un rompecabezas feliz, el cine, biutiful con acento en la t, las clases, la casualidad, estaba hablando del ahora, la botella en el mar, el mensaje del mar en la botella, café, café de colombia, la llamada que no entiendo, el sms que emociona, tres escalones, y nunca para atrás, hasta los enchufes son grandes aquí, los cierres, y el mismo poema en otra hoja del subte, castro barros y vos quien sos?, y luego? y todos y ellos y entonces, ene sensaciones bonitas cero pensamientos negativas, no a los electrones si a los protones y un poco de neutrones, la balanza perfecta dijo ella, que se yo, igual yo también soy mono, y por lo menos, no por lo menos nada, me llamarás, me dejarás dormir, me invitarás, te amaré bailes.
Le dije: Plaza Miserere, 4:00 am, Marzo 2011.
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